ACAPULCO, Gro.- (Notimex).- Los países de América Latina deben enfocarse en emprender los procesos de reformas que les faciliten alcanzar tasas más altas de crecimiento económico, destacó el expresidente de México, Ernesto Zedillo Ponce de León.
Durante su participación en el Encuentro Empresarial Acapulco 2013, que organiza la Coparmex, señaló que independientemente del grado de ambición de las reformas, en ningún momento deben descuidar el equilibrio macroeconómico, así como mantener la disciplina fiscal y monetaria.
En su ponencia Certidumbres, Riesgos e Incertidumbres de la Globalización: los retos para las economías emergentes, dijo que la violación a dicha disciplina monetaria y fiscal fue la responsable de inflaciones, crisis financieras recurrentes y una mayor pobreza en la región.
Asimismo se reflejó en bajas tasas de ahorro que aún aquejan a las economías de la región, pues en los países desarrollados la inversión pública es de hasta 25 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB), y los países latinoamericanos están lejos de alcanzar estos niveles.
Zedillo Ponce de León destacó que a pesar de que la inversión privada es un motor de crecimiento, ninguna economía se sostiene sin tener altas tasas de inversión pública, pues ello fomenta las inversiones privadas a condición de que se tenga un sustento financiero sano.
"De aquí la importancia de implementar reformas que aumenten los bajísimos ingresos tributarios que padecen muchas naciones de la región", sin embargo, quien fuera Presidente de México durante el periodo 1994-2000 destacó que otro camino posible es actualizar la forma en que los países explotan sus recursos naturales:
"Está comprobado que el monopolio basado en el control absoluto de empresas estatales sin inversión privada, objetivos claros de eficiencia comercial y de operación, así como poca rendición de cuentas, no produce el máximo impacto en el desarrollo de los países", abundó.
Pues los beneficios de la explotación de los recursos pueden alentarse a través de la inversión de capital privado, siempre y cuando existan reglas claras que incluyan regímenes impositivos orientados a maximizar la renta por el recurso apropiable por el Estado.
En ese sentido, refirió que la reforma energética propuesta por el Ejecutivo Federal en México, podría aumentar la contribución del sector que actualmente se recauda en el país.
Mientas que en materia de empleo, dijo que las inversiones a la educación se deben traducir en crecimiento del conocimiento y habilidades cognoscitivas básicas de la población, para que se amplíe el acervo de capital humano y rinda los efectos esperados en el crecimiento de la economía.
Señaló que quienes han estudiado el tema, encontraron que la inversión en educación en la región es mucho menor a la de otras economías y predicen que reformas que mejoren ese desempeño tendrían un efecto favorable en el desempeño de los países.
"De aquí la importancia de ejecutar rigurosamente las reformas constitucionales y legales en materia de educación recientemente aprobadas en nuestro país", pues la insuficiencia del capital humano es básico para explicar el bajo crecimiento del PIB, destacó.
De tal forma, concluyó que los gobiernos comprometidos con el crecimiento deben liberalizar más profundamente sus mercados de productos para crear más empresas y mercados laborales flexibles, para alcanzar el desarrollo económico.
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