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La llegada del invierno y las fiestas de fin de año, así como los riesgos a la salud aumentan considerablemente sobre todo entre la población infantil y de la tercera edad, aseguró el diputado Jorge Palacios Arroyo (PAN), quien solicitó a las autoridades del GDF difundir las medidas necesarias que se deben tomar para prevenir enfermedades respiratorias, accidentes o contingencias ambientales.
Palacios Arroyo, manifestó que "según la Coordinación General de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación, se prevé la presencia de entre 38 y 46 frentes fríos durante esta temporada invernal, mientras que para enero y febrero del año entrante se registrarán las temperaturas más bajas, por la presencia del fenómeno de la Niña, la cual traerá sequía en el norte, heladas en el centro y lluvia en el sureste del país, por lo que es importante, desde ahorita, concientizar a los capitalinos sobre la importancia de cuidarse".
Señaló que si bien no se han disparado los casos de influenza estacionaria, H3N2, la A H1N1 o el virus California, enfermedades más comunes en esta época, por lo que es necesario exhortar a los padres de familia a que abriguen bien a los niños y adultos mayores, lavarse las manos frecuentemente, darles de beber muchos líquidos y no automedicarlos.
Comentó que los principales síntomas de la influenza son dolor de cabeza, de piernas y garganta, tos, catarro, malestar general y aumento de la temperatura: "De presentar este cuadro es importante llevarlos de inmediato a la clínica más cercana", advirtió.
El también integrante de la Comisión de Salud, dijo que las fiestas decembrinas son muy atractivas para los niños de entre 4 y 14 años de edad, quienes se sienten atraídos por la quema de fuegos pirotécnicos, muchas veces sin la supervisión de un adulto, lo que puede derivar en incendios y lesiones graves en la cara o extremidades, o bien, en la muerte.
En este sentido, agregó que de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, en México los accidentes por quemaduras ocupan el cuarto lugar de mortalidad general y son la primera causa de muerte infantil. "La quema de fuegos pirotécnicos no sólo atenta contra la salud de las personas, sino que produce un severo problema de contaminación atmosférica, ya que al detonar cualquier explosivo se forma un coctel de sustancias químicas compuesto por millones de partículas suspendidas, que envueltas por el frío permanecen flotando por horas en el ambiente, provocando diversas enfermedades".
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