Armando Maceda
La iniciativa preferente en materia laboral del Ejecutivo y retomada y aprobada por el PRI no es la reforma que México requiere, pues en la propuesta continúa intacto el viejo esquema y las estructuras corporativas del viejo sindicalismo charro y corporativo vinculado al Partido Revolucionario Institucional, afirmó el diputado Silvano Aureoles Conejo.
El coordinador de los diputados del PRD lamentó que los legisladores del Partido Acción Nacional "se hayan dejado derrotar en una vieja demanda de transparencia, rendición de cuentas en los sindicatos de este país".
"¿Quién habrá redactado, quién habrá hecho la propuesta de fondo para poder seguir defendiendo esas viejas estructuras corruptas que tanto daño le han hecho al país?", preguntó Aureoles Conejo.
Señaló que el PRD no renunciará al debate de las ideas, "donde prevalezca la esencia y no el arrebato ni los protagonismos".
"Queremos que quede claro ante el pueblo de México quién propone qué, quién defiende los derechos fundamentales de nuestro pueblo y quiénes, en aras de beneficiar intereses de grupo o intereses partidarios, hoy caminan en la ruta de aprobar una iniciativa que lesiona a los trabajadores", indicó.
Silvano Aureoles Conejo dijo que es fundamental revisar los temas sustantivos de la agenda nacional, "este país sigue por una ruta terriblemente ingrata, porque en lugar de disminuir las condiciones de pobreza y marginación, seguimos en la ruta de seguir fabricando pobres".
"¿Por qué avalar el contrato por hora, el despido injustificado, por correo, por un aviso en el periódico, por qué limitar el derecho del contrato colectivo, por qué limitar el derecho a huelga y otras conquistas consagradas en la ley?", cuestionó
El coordinador parlamentario del PRD expresó que deben defenderse los derechos de los trabajadores, "nuestro proyecto se sustenta en ideas, no en la intriga ni en la diatriba, sino en cómo construimos juntos ese país que queremos, que demandamos y que buscamos, porque queremos mejores condiciones para nuestra gente".
Llamó a los diputados de todas las bancadas a ser sensibles ante las injusticias, "¿quién en su sano juicio caminaría en el sentido de seguir lesionando lo más elemental de los derechos de nuestro pueblo? No es casual que durante tres décadas hemos transitado por un camino equivocado", sostuvo.
El día de la aprobación, un grupo del PRD, del que Aureoles se deslindó por su actuación, tomó la tribuna del Pleno por considerar que lo hicieron para evitar que continuara un "falso debate".
En declaraciones a la prensa tras suspender su protesta, señalaron que el procedimiento para elaborar el dictamen fue ilegal y se vulneraron los derechos de los trabajadores.
"La razón de nuestras acciones fueron porque no convalidamos la sesión, una discusión que se quiere dar sin un procedimiento claro para aprobar una reforma que no debe ser aprobada", dijo la diputada Aleida Alavez Ruiz, acompañada de 25 diputados que participaron en la toma.
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