Por: Armando Maceda
El diputado del PRI Manuel Añorve Baños y ex alcalde de Acapulco, rechazó que haya dejando al municipio en estado de "quiebra", como lo aseguró ayer lunes el actual alcalde, Luis Walton Aburto.
Alertó este lunes que Añorve realizó una deuda financiera de 2,142 millones de pesos, por lo que pidió el rescate financiero del gobierno federal.
Pero el priistas responde que trata de difamar a la administración que él encabezo, al presentar cifras inexactas.
Se excusó al referir que el ex alcalde, Félix Salgado Macedonio le dejó un adeudo de 919 millones de adeudo, que disminuyó a 806 millones durante su gobierno, como presidente municipal de Acapulco.
Señaló que las finanzas de su administración están "sustentadas en libros", ya que todos los presidentes municipales, gobernadores y la administración federal tienen la obligación de rendir cuentas transparentes.
"Recuerden que hoy la rendición de cuentas no es una moda, hoy es una obligación; tengo saldadas mis cuentas… no tengo ningún problema, para eso están las instancias de fiscalización", indicó Añorve Baños.
El diputado consideró que las acusaciones sobre su gestión son de índole política e invitó al presidente municipal a sumar a las fuerzas políticas y trabajar por Acapulco.
"Por mí que ni se preocupe, en el 2015 hay elecciones y estas elecciones ni siquiera están en mi agenda política; yo estoy aquí trabajando de tiempo completo en esta labor legislativa", agregó.
Expresó que durante su gobierno generó inversión privada de más de 15 mil millones de pesos en el municipio, asimismo, creó 15 mil empleos directos y 24 mil indirectos.
El coordinador del PRI, Manlio Fabio Beltrones Rivera, entró en su defensa al considerar que son imprecisas las acusaciones del alcalde de Acapulco, Luis Walton Aburto, respecto al adeudo con que habría dejado ese municipio, Manuel Añorve Baños.
"He leído lo que ha manifestado el actual presidente municipal, pero también he leído la respuesta del ex presidente municipal, del diputado Manuel Añorve, y me parece sumamente sólida la respuesta en base a las imprecisiones de lo primero que se dio a conocer", dijo.
El legislador manifestó que el Congreso no debe "ser tapadera de nadie", de darse a conocer más acusaciones de deudas en municipios y estados, y no puede convertirse en "plañidera (mujer llamada y pagada para llorar en los entierros) de los que no sepan cómo resolver sus problemas".
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