"Oremos en silencio pidiendo la paz. Todos en silencio", solicitó el Pontífice, que se acababa de referir a su "preocupación" por las noticias procedentes de ambas zonas en conflicto. El Papa pidió a los congregados ante la Basílica de San Pedro "perseverar en la oración por las situaciones de tensión y conflicto que persisten en varias zonas del mundo, especialmente en Medio Oriente y en Ucrania".
Francisco tuvo unas palabras también sobre la situación de los cristianos en Irak, una comunidad de la que dijo que, "desde el inicio del cristianismo, ha vivido con sus conciudadanos ofreciendo una contribución significativa al bien de la sociedad".
El Pontífice también denunció hoy domingo la persecución de los cristianos en Irak, donde cientos de personas de la ciudad de Mosul tuvieron que huir tras un ultimátum de un grupo yihadista. "Nuestros hermanos son perseguidos y enviados fuera; deben dejar sus casas sin tener la posibilidad de llevarse nada", dijo Francisco en la Plaza de San Pedro tras el tradicional rezo del Angelus dominical.
"Aseguro a estas familias y a estas personas mi cercanía y mi constante oración", dijo Francisco.
El Papa argentino también mencionó los conflictos en Medio Oriente y Ucrania.
"Les exhorto a perseverar en la oración por las situaciones de tensión y de conflicto que persisten en diferentes partes del mundo, especialmente en Medio Oriente y Ucrania", y aseguró que "la violencia no se vence con la violencia, la violencia se gana con la paz".
Los yihadistas del Estado Islámico, que controlan Mosul desde hace varias semanas, lanzaron ayer sábado un ultimátum a los cristianos de la ciudad para que se conviertan al islam, paguen un impuesto especial o se vayan.
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