Aceleró al más allá; perece prensado en Muyuguarda

Raúl Ma­cías, Foto: Sergio Vázquez

Rá­pi­do, pe­ro no in­tré­pi­do fue el con­duc­tor de un au­to Ven­to gris, quien al cir­cu­lar pre­sun­ta­men­te a ex­ce­so de ve­lo­ci­dad, per­dió el con­trol en Mu­yu­guar­da y Cons­ti­tu­ción de 1917, en Xo­chi­mil­co. El au­to com­pac­to dio unas "vol­te­re­tas" y que­dó, fi­nal­men­te, so­bre el tol­do. El hom­bre que lo ma­ne­ja­ba per­dió la vi­da en­tre los hie­rros re­tor­ci­dos del au­to­mo­tor.

Au­to­mo­vi­lis­tas que pa­sa­ban por el lu­gar in­ten­ta­ron ayu­dar­lo, pe­ro na­da se po­día ha­cer. Ge­rar­do So­lís Juá­rez, con­duc­tor del au­to, se en­con­tra­ba sin vi­da, co­mo traía co­lo­ca­do el cin­tu­rón de se­gu­ri­dad su cuer­po no ca­yó en su to­ta­li­dad. La par­ca lo sor­pren­dió cuan­do al pa­re­cer iba a ex­ce­so de ve­lo­ci­dad y ba­jo los in­flu­jos del al­co­hol, ya se rea­li­zan los es­tu­dios clí­ni­cos pa­ra de­ter­mi­nar si iba ebrio o no.

A sus 26 años, se la ju­gó en el au­to com­pac­to, nun­ca pen­só que el des­ti­no no le iba a per­do­nar los ex­ce­sos, ya la fla­ca via­ja­ba con él cuan­do ace­le­ró a más de la ve­lo­ci­dad per­mi­ti­da. Los tes­ti­gos ocu­la­res in­for­ma­ron a los uni­for­ma­dos que eran cer­ca de las 4:30 ho­ras de ayer cuan­do se re­gis­tró el ac­ci­den­te, qui­zá iba pa­ra la "cham­ba" o tal vez an­da­ba fes­te­jan­do al­go.

Di­je­ron que es­cu­cha­ron un re­chi­nar de llan­tas; con­fia­ban en que pu­die­ra li­brar­la al fre­nar, pe­ro la ve­lo­ci­dad fue su per­di­ción, el au­to dio al­gu­nos gi­ros an­tes de que se de­tu­vie­ra. Al ver que ya ha­bía pa­ra­do y es­ta­ba re­cos­ta­do el au­to­mó­vil so­bre el tol­do, se acer­ca­ron pa­ra ver lo ocu­rri­do; ahí es­ta­ba ya Ge­rar­do, sin vi­da y su cuer­po man­cha­do de san­gre.

Tres ho­ras des­pués, más o me­nos, se pre­sen­tó el agen­te del mi­nis­te­rio pú­bli­co de la Coor­di­na­ción Te­rri­to­rial de XOCH-2 a dar fe de los he­chos, apo­ya­do por pe­ri­tos en fo­to­gra­fía, me­cá­ni­ca y trán­si­to te­rres­tre, rea­li­za­ron las pri­me­ras di­li­gen­cias, to­ma­ron las grá­fi­cas en las cua­les se veía la po­si­ción en la que que­dó el aho­ra oc­ci­so, quien a su cor­ta edad no res­pe­tó los lí­mi­tes de ve­lo­ci­dad.

El agen­te del mi­nis­te­rio pú­bli­co es­pe­ra los exá­me­nes que se le prac­ti­ca­ron al cuer­po, pa­ra de es­te mo­do po­der co­no­cer si es que se en­con­tra­ba ba­jo los efec­tos del al­co­hol o sim­ple­men­te per­dió el con­trol del au­to al ir a ex­ce­so de ve­lo­ci­dad, por lo que se dio ini­cio a la car­pe­ta de in­ves­ti­ga­ción por el de­li­to de ho­mi­ci­dio cul­po­so por trán­si­to ve­hi­cu­lar
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