Álvaro Velázquez
CUAUTITLÁN IZCALLI, Méx.- Un hombre de entre 55 y 60 años de edad fue privado de la vida a golpes y de por lo menos 7 puñaladas en diferentes partes del cuerpo y su cadáver descubierto esta mañana, abandonado casi frente a la puerta de una iglesia, a 500 metros de distancia del penal de Barrientos.
Autoridades policiacas informaron que en torno a este hecho se descarta totalmente el robo como móvil del crimen, ya que el ahora occiso llevaba puesto su reloj y tenía su cartera con un billete de 200 pesos en su interior, y más bien consideraron que por la saña con que actuaron los homicidas, que este hombre fue privado de la vida producto de una venganza, sin embargo, dijeron, serán las investigaciones que ya realizan elementos de la policía ministerial las que determinen cuál pudo ser la verdadera causa por la que este individuo fue asesinado.
El cadáver del hombre, hasta el momento desconocido, de quien únicamente se dijo que era de entre 55 y 60 años de edad, notoria escasez de cabello, con bigote abultado y que vestía un suéter negro, camisa azul cielo, pantalón beige y zapatos negros, fue encontrado minutos antes de las 7:00 de mañana de este sábado, abandonado casi frente a la puerta de la iglesia de la Colonia Santa María Guadalupe La Quebrada, a un costado de la Avenida Gustavo Baz, en los límites de este municipio y el de Tlalnepantla, a escasos 500 metros de distancia del penal de Barrientos.
Algunas personas que caminaban por la zona, al percatarse que dicho hombre estaba tirado y que al parecer estaba muerto, ya que no se movía, ni respondía a sus llamados, de inmediato dieron parte a la policía, por lo que minutos más tarde arribaron al lugar elementos de la Comisión Estatal de Seguridad Ciudadana (CESC) y de la Policía Municipal, quienes al confirmar que dicho individuo ya estaba muerto, acordonaron toda la zona y pidieron la intervención del ministerio público para que diera fe de los hechos.
Durante las primeras inspecciones oculares que practicó el MP en la escena del crimen, se observó que el desconocido quedó tirado boca arriba, presentaba brutales golpes, y por lo menos 7 heridas por arma punzocortante en diferentes partes del cuerpo.
Elementos policíacos, indicaron que al momento en que el occiso fue interceptado por su o sus verdugos, al parecer se dirigía a su trabajo, pues llevaba su lonchera y un recipiente con agua, además de que consideraron que pudo ser privado de la vida en una venganza de tipo personal o de presuntos delincuentes, pues como ya se dijo el robo como móvil del crimen quedaba totalmente descartado, ya que llevaba puesto su reloj y se encontró en una de las bolsas de su pantalón su cartera con un billete de 200 pesos.
Sin embargo, dijeron, serán elementos de la policía ministerial quienes determinen cuál pudo ser el verdadero móvil de este crimen y quién o quiénes pudieron ser los responsables, una vez que el occiso sea identificado y después de que concluyan con las investigaciones correspondientes.
En tanto, por estos hechos, el agente del ministerio público dio inicio a la carpeta de investigación correspondiente por el delito de homicidio
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