Por: Alvaro Velázquez, LA PRENSA
VALLE DE CHALCO, Méx., 9 de febrero.- Un hombre, de 35 años de edad, que se desempeñaba como encargado de una mueblería fue asesinado a golpes y balazos ante la aterrada mirada de varios de sus compañeros, luego de que se enfrentó a tres delincuentes que entraron a la negociación con la intención de cometer un asalto.
Mientras que el malogrado trabajador cayó muerto, en medio de un enorme charco de sangre, los presuntos homicidas, pistola en mano se abrieron paso y después de que se apoderaron de una pantalla de plasma y varios aparatos electrodomésticos, se dieron a la fuga, ante la mirada atónita de varios de los compañeros del occiso, sin que hasta el momento las autoridades policiacas sepan nada de su identidad y posible paradero.
Los hechos que costaron la vida de quien fue identificado como Rafael Contreras García, de 35 años de edad, se registraron la tarde-noche de ayer, en el interior de la mueblería con razón social Comercializadora de Saldos y Remates, ubicada sobre la calle Guadalupe Posadas, manzana 2, lote 7, en la Colonia Darío Martínez, Primera Sección, en este municipio.
Los tripulantes de la patrulla 9716 de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) que fueron los primeros en llegar a la escena del crimen, informaron que de acuerdo a las primeras versiones que dieron algunos compañeros del ahora occiso, trabajaban con toda normalidad y estaban casi a punto de cerrar sus puertas al público, cuando fueron sorprendidos por tres sujetos que a punta de pistola y bajo amenazas de muerte amagaron al encargado para obligarlo a entregarle el dinero de la venta del día.
Sin embargo, dijeron, como se opuso e incluso enfrentó y forcejeó con uno de los delincuentes para evitar el atraco, los otros dos lo golpearon salvajemente y durante el mismo forcejeo el malviviente con el que peleaba lo asesinó de un balazo a la altura de la oreja derecha y uno más en la palma de la mano derecha.
A consecuencia de los balazos que recibió, señalaron, el encargado cayó boca abajo, casi instantáneamente muerto, en medio de un charco de sangre, en tanto que los presuntos asaltantes se robaron una pantalla de plasma, varios aparatos electrodomésticos y enseguida con el botín en su poder rápidamente salieron de la negociación para darse a la fuga antes de que llegara la policía y los detuviera, dejando en el lugar toda una estela de terror, llanto y sangre.
"No tenía por qué haberlo hecho, lo más coherente es que hubiera entregado el dinero a los delincuentes, nuestro patrón no le va a responder a su familia, ni va a considerar su valentía, todo fue a costa de su vida y su muerte fue en vano, pues ahora ya nadie lo va a revivir y los que van a sufrir las consecuencias son sus familiares", dijeron varios de los compañeros del ahora occiso.
Durante las primeras inspecciones oculares que practicó en el lugar, el ministerio público informó que el ahora occiso quedó tirado boca abajo y que presentaba dos balazos, uno a la altura de la oreja derecha y el otro en la palma de la mano del mismo lado, lo que confirma que en un intento por evitar el atraco, el ahora occiso forcejó con uno de sus verdugos.
Policías ministeriales informaron que con base en los datos y la media filiación que los empleados aportaron de los presuntos homicidas, ya iniciaron las investigaciones correspondientes y confiaron en que conforme avancen los trabajos policiacos puedan identificarlos, ubicarlos y detenerlos, acción que se espera así suceda, pues sería lamentable que este crimen quede impune y que delincuentes como éstos anden tranquilamente por las calles, tal vez en busca de otras víctimas
VALLE DE CHALCO, Méx., 9 de febrero.- Un hombre, de 35 años de edad, que se desempeñaba como encargado de una mueblería fue asesinado a golpes y balazos ante la aterrada mirada de varios de sus compañeros, luego de que se enfrentó a tres delincuentes que entraron a la negociación con la intención de cometer un asalto.
Mientras que el malogrado trabajador cayó muerto, en medio de un enorme charco de sangre, los presuntos homicidas, pistola en mano se abrieron paso y después de que se apoderaron de una pantalla de plasma y varios aparatos electrodomésticos, se dieron a la fuga, ante la mirada atónita de varios de los compañeros del occiso, sin que hasta el momento las autoridades policiacas sepan nada de su identidad y posible paradero.
Los hechos que costaron la vida de quien fue identificado como Rafael Contreras García, de 35 años de edad, se registraron la tarde-noche de ayer, en el interior de la mueblería con razón social Comercializadora de Saldos y Remates, ubicada sobre la calle Guadalupe Posadas, manzana 2, lote 7, en la Colonia Darío Martínez, Primera Sección, en este municipio.
Los tripulantes de la patrulla 9716 de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) que fueron los primeros en llegar a la escena del crimen, informaron que de acuerdo a las primeras versiones que dieron algunos compañeros del ahora occiso, trabajaban con toda normalidad y estaban casi a punto de cerrar sus puertas al público, cuando fueron sorprendidos por tres sujetos que a punta de pistola y bajo amenazas de muerte amagaron al encargado para obligarlo a entregarle el dinero de la venta del día.
Sin embargo, dijeron, como se opuso e incluso enfrentó y forcejeó con uno de los delincuentes para evitar el atraco, los otros dos lo golpearon salvajemente y durante el mismo forcejeo el malviviente con el que peleaba lo asesinó de un balazo a la altura de la oreja derecha y uno más en la palma de la mano derecha.
A consecuencia de los balazos que recibió, señalaron, el encargado cayó boca abajo, casi instantáneamente muerto, en medio de un charco de sangre, en tanto que los presuntos asaltantes se robaron una pantalla de plasma, varios aparatos electrodomésticos y enseguida con el botín en su poder rápidamente salieron de la negociación para darse a la fuga antes de que llegara la policía y los detuviera, dejando en el lugar toda una estela de terror, llanto y sangre.
"No tenía por qué haberlo hecho, lo más coherente es que hubiera entregado el dinero a los delincuentes, nuestro patrón no le va a responder a su familia, ni va a considerar su valentía, todo fue a costa de su vida y su muerte fue en vano, pues ahora ya nadie lo va a revivir y los que van a sufrir las consecuencias son sus familiares", dijeron varios de los compañeros del ahora occiso.
Durante las primeras inspecciones oculares que practicó en el lugar, el ministerio público informó que el ahora occiso quedó tirado boca abajo y que presentaba dos balazos, uno a la altura de la oreja derecha y el otro en la palma de la mano del mismo lado, lo que confirma que en un intento por evitar el atraco, el ahora occiso forcejó con uno de sus verdugos.
Policías ministeriales informaron que con base en los datos y la media filiación que los empleados aportaron de los presuntos homicidas, ya iniciaron las investigaciones correspondientes y confiaron en que conforme avancen los trabajos policiacos puedan identificarlos, ubicarlos y detenerlos, acción que se espera así suceda, pues sería lamentable que este crimen quede impune y que delincuentes como éstos anden tranquilamente por las calles, tal vez en busca de otras víctimas
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